Reseña: Los jardines de la luna, de Steven Erikson

SINOPSIS: Tras guerras interminables y amargas luchas internas, el descontento se ha apoderado del Imperio de Malaz. Incluso las tropas imperiales, siempre ansiosas por derramar sangre, necesitan un respiro. Sin embargo, las pretensiones expansionistas de la emperatriz Laseen no tienen límites, más aun cuando son reforzadas por sus temibles agentes de la Garra.

El sargento Whiskeyjack y su escuadrón necesitan tiempo para llorar los muertos del último asedio, pero Darujhistan, la última de las Ciudades Libres de Genabackis, los espera; en ella ha puesto la emperatriz su mirada depredadora.

El Imperio no está solo en este juego. Las fuerzas siniestras conspiran dentro y fuera de las sendas mágicas, y entretanto, hasta los dioses se preparan para la batalla…

RESEÑA: Es difícil encarar la reseña de una novela que sirve de inicio para un rico y enrevesado universo fantástico, con una trama tan extensa como compleja y poblada por una increíble multitud de personajes. Malaz, el Libro de los Caídos es muestra clara del poder de lo que podríamos calificar de "fantasía dura", tan poderosa que en una primera lectura puede llegar a apabullar al lector (el propio Erikson ha reconocido que no tenía ninguna intención de suavizar la sensación de desconcierto que envuelve muchos momentos de la primera novela de la saga) al tiempo que fascina por lo bien construido y lo original de sus planteamientos. A esto hay que añadirle que las siguientes entregas de la saga (y la relectura de los primeros volúmenes) permite apreciar lo bien pensada que está la estructura y la trama de esta ambiciosa propuesta fantástica, construida como un gigantesco puzle en el que cada una de sus piezas encuentra su sitio a la perfección.
Entre 1999 y 2011 el canadiense Steven Erikson fue capaz de completar su épica saga, formada por un total de diez novelas y con una extensión de no menos 700 páginas cada una de ellas, que ahora recupera el sello Nova en una nueva edición en tapa dura que por fin completará su publicación en español. Los jardines de la Luna nos presenta un mundo que aunque en un principio pueda parecer casi arquetípico de la fantasía moderna, pronto empieza demostrar sus afiladas aristas para romper los tópicos fantásticos: el Imperio de Malaz es una gran potencia humana que bajo el nuevo gobierno de la ambiciosa emperatriz Laseen está embarcada en la conquista del lejano continente de Genabackis. Lo que pretendía ser una rápida campaña ha acabado convertida en una brutal y sangrienta guerra donde se mezcla el acero y la hechicería, con el objetivo último de dominar a las prósperas Ciudades Libres.

Después de años de enfrentamiento, Laseen se encuentra lista para lanzarse sobre la joya del continente: la rica ciudad de Darujhistan. La trama principal de Los jardines de la Luna sigue los reveses a los que se enfrenta el Segundo ejército del Imperio de Malaz en la que será su campaña más decisiva. En primera linea de esta lucha se encuentran los legendarios Abrasapuentes, el que antaño fuera un cuerpo de élite en tiempos del anterior emperador Kellanved, ahora han acabado rebajados a simple carne de cañón. Sin embargo muy pronto quedará claro que no solo los poderes mundanos se están reuniendo en Genabackis para la batalla, pues diferentes Ascendientes (o por simplificar, los dioses del mundo malazano) empiezan a hacer acto de presencia entorpeciendo o favoreciendo a los diversos bandos en conflicto, según sus propios intereses.
Como todo el mundo señala con justicia Steven Erikson no se anda con medias tintas en la presentación de su saga y sin ninguna tibieza lanza de lleno al lector a este complejo mundo fantástico, sin las habituales explicaciones para suavizar el contexto y la ambientación que tanto abundan en otras obras de esta temática. Nos encontramos metidos de cabeza en una extensa guerra de la que no conocemos bien sus detalles, con diversas facciones enfrentadas dentro del propio Imperio, con decenas de personajes de los que apenas logramos adivinar sus intenciones, y de los cuales muchos cuentan con asombrosos poderes mágicos. Sí, existe una especie de magia, las “sendas”, pero Erikson no desperdicia palabras en explicarla y da por sentado muchos de sus detalles...  Y por si fuera poco, de vez en cuando, los mismísimos dioses bajan a entremezclarse en los asuntos de los mortales para manejarlos a su antojo. Todo esto puede desesperar a algunos lectores, ya que conforme se avanza en la trama se mantiene la sensación de estar perdiéndose algo. Sin embargo esto no significa que Los jardines de la Luna sea una novela pretenciosa, mal planteada o decepcionante: es cierto que exige una mayor atención del lector a los numerosos detalles y la tendencia a no explicar nada de forma clara de Erikson, pero ese acercamiento otorga gran parte de la fuerza, el encanto y el misterio que son el corazón del universo malazano.
Además hay que señalar que todos los arcanos e intrigas que quedan en el aire durante la lectura de este primer tomo del Libro de los Caídos no son puro relleno 'palomitero', ya que cada uno tiene su razón de ser y encuentra su explicación a lo largo de la saga. Como George Martin o Brandon Sanderson, el canadiense Erikson también demuestra su gran maestría a la hora de crear un complejo puzle, colocando con mimo todas sus piezas, para resolverlo de una forma realmente sorprendente para el lector pero totalmente coherente con la historia presentada.
En cualquier caso la historia de esta primera novela se desarrolla de una forma ágil, en una trama que mezcla la acción de la guerra con la intriga política y mágica, donde diferentes facciones se mueven alrededor de Darujhistan en busca de sus propios y oscuros intereses. Aquí es donde nos topamos con otro de los grandes puntos fuertes de Malaz: la impresionante galería de personajes que desfilan ante el lector. Recurriendo a un planteamiento francamente realista de la fantasía, con giros que lo acercan al grimdark, sus protagonistas son una completo reflejo de las virtudes y defectos humanos: la nobleza de Ganoes Paran, la sobriedad de Whiskeyjack, la inteligencia de Velajada, la ambición de la consejera Lorn, el compañerismo a prueba de bomba de los Abrasapuentes, la rectitud de Dujek Unbrazo, la verbosidad de Kruppe, el cinismo del no-muerto Onos T'oolan, las dobleces de Ammanas y Cotillion, o el aura de poder que rodea a Anomander Rake. Pero si me tengo que quedar con un personaje de esta primera novela es la soldado Lástima, una joven de apenas 15 años a la que los dioses utilizarán a su antojo conviertiéndola en una asesina temible… incluso para sus propios compañeros de pelotón.

En contra del arranque de la decalogía de Malaz juega la propia propuesta fantástica de Erikson: la multitud de personajes y tramas puede apabullar al lector primerizo, así como puede sentirse desalentado por las pocas explicaciones que el autor canadienses ofrece de las motivaciones de los protagonistas o del oscuro juego de poderes que se atisba entre bambalinas. Será el lector el que tenga que adivinar, por como se desarrolla la trama y lo que dejan caer los personajes, cuál es la lucha última que se desarrolla de forma oculta tras las historias principales que se van entrelazando. Tampoco su estilo puede resultar excesivamente atrayente en este primer volumen de la saga, con conversaciones que en ocasiones se vuelven difíciles de seguir o con demasiados intervinientes sin que el narrador aclare quién habla y preñadas de referencias a sucesos o personajes que todavía no puede llegar a captar.

Afortunadamente, y para no desmoralizar a los recién llegados a Malaz, la narrativa de Erikson que en este primer volumen puede parece poco cuidada o incluso tosca, con tendencia a confundir al lector, es algo que el autor canadiense pule (y mejora mucho) en las siguientes entregas de la saga malazana, alcanzando cotas muy altas de calidad literaria a partir de su tercera entrega. También cabe señalar que la nueva edición de Nova trata de suavizar el estilo áspero de esta primera entrega con una nueva corrección de estilo a cargo de Alexander Páez. No en vano si en algo están de acuerdo todos los lectores es que Los jardines de la Luna es la obra más floja de la saga y la que más cuesta leer.

En lo que Erikson no flaquea es en su capacidad de entretener al lector, con grandes dosis de magia y acción desbocada. Y es principalmente en el tramo final de la novela  donde se produce la gran convergencia en una imparable mezcla de tensión, revelaciones y acción desatada donde los diversos arcos argumentales que se han desarrollado a lo largo de la novela se reúnen en una explosiva conclusión. También os advierto ya que esto sienta las bases de lo que será otra de las características básicas de la decalogía del Libro de los Caídos: sus imparables finales que dejan casi sin respiración al lector.

En conjunto Los jardines de la Luna es una atrevida propuesta fantástica que hace las delicias del aficionado al género al zambullir al lector en un abigarrado y complejo mundo, poblado por multitud de pueblos y facciones enfrentados, donde la acción y la magia juegan a favor de una historia repleta de giros y sorpresas. El inicio de Malaz es una novela que no es para nada perfecta, con defectos que Erikson irá puliendo en el desarrollo de su épica decalogía, pero que desde el principio deslumbra con un impresionante 'worldbuilding', hasta el punto de llegar a apabullar al lector por la gran cantidad de detalles y sucesos que se dan por sobreentendidos. Todo ello se usa para construir una historia plenamente comprensible de principio a fin con un puñado de personajes realmente fascinantes que tratan de demostrar que en un mundo brutal y duro no hay porque perder la esperanza. Steven Erikson nos presenta una atractiva puerta de entrada a una saga repleta de batallas épicas, hechicería desbordada y personajes memorables, que en cada nueva entrega es capaz de mejorar y engrandecer el mundo creado, pero que en Los jardines de la Luna ya evidencia que el canadiense es capaz de meternos en una historia de fantasía dura que mezcla figuras y elementos clásicos del género con multitud de añadidos originales, sirviendo de admirable introducción a una de las sagas imprescindibles para los amantes de la épica fantástica. 

VALORACIÓN 7/10

FICHA

Los jardines de la luna (Malaz, el Libro de los Caídos 1)

Steven Erikson

Nova

Tapa dura con sobrecubierta, 784 páginas

Traducción de Miguel Antón Rodríguez

Corrección de estilo de Alexander Paéz

25 euros, en  ebook por 7,99 euros

A la venta en Amazon