SINOPSIS: Después de las decepciones de Li Heng, Danzante y Kellanved se recuperan en una pequeña e insignificante isla llamada Malaz. Inmediatamente, por supuesto, Kellanved planea hacerse con el control. Para ello unen fuerzas con un pequeño grupo de napanianos que han huido de la guerra civil en su propia isla natal. El plan, sin embargo, pronto se tuerce cuando Kellanved desarrolla una extraña y peligrosa fascinación por una misteriosa y antigua estructura que encuentra en la isla.
El caos en la región se extiende también a los planos metafísicos cuando un joven sacerdote de D'rek comienza a cuestionar la podredumbre en el corazón de los adoradores del dios de la putrefacción. Y de vuelta en Li Heng, Dassem, ahora proclamado la Espada del Embozado, se ve culpado por una plaga que lo lleva a una crisis de fe y a buscar respuestas.
Mientras tanto, la guerra con la vecina isla de Nap amenaza a todos, los aliados reclutados se cuestionan la cordura de Kellanved, y entidades poderosas aumentan su interés por el pequeño mago de Dal Hon. Danzante se enfrenta a una dura elección: ¿debe renunciar a su asociación? Especialmente cuando la obsesión de su compañero por las sombras y los artefactos antiguos lleva a ambos alarmantemente cerca de la muerte y de la destrucción. Después de todo, ¿quién en su sano juicio realmente querría entrar en un antiguo misterio conocido por todos como la 'Casa de la Muerte'?
RESEÑA: Ian C. Esslemont inició el año pasado una nueva trilogía que retrocedía en el tiempo alrededor de unos cien años antes de los sucesos del Libro de los Caídos para explorar el que es sin duda uno de los periodos más interesantes del universo malazano. Nada menos que la fundación del todopoderoso Imperio de Malaz, y todo ello narrado desde el privilegiado punto de vista de dos los personajes más relevantes del mundo fantástico creado por este autor canadiense y su amigo Steven Erikson: el emperador Kellanved y el asesino Danzante.
Como ya comenté en la reseña de la primera entrega, Dancer's Lament marcaba un notable arranque de trilogía, con una historia más lineal y sencilla de las que nos tiene acostumbrados la enrevesada saga Malaz pero al mismo tiempo lo suficientemente fascinante para cualquier lector de fantasía. La química de la pareja protagonista y la oportunidad de explorar un periodo temporal clave lograban que la Dancer's Lament funcionara tanto como una perfecta puerta de entrada a este universo fantástico para un nuevo lector (sin duda mucho más sencilla que el arranque 'a todo trapo' que marca Los jardines de la Luna), como para satisfacer a aquellos veteranos malazanos que quieren conocer más detalles del rico trasfondo histórico-legendario de la saga.
Como ya comenté en la reseña de la primera entrega, Dancer's Lament marcaba un notable arranque de trilogía, con una historia más lineal y sencilla de las que nos tiene acostumbrados la enrevesada saga Malaz pero al mismo tiempo lo suficientemente fascinante para cualquier lector de fantasía. La química de la pareja protagonista y la oportunidad de explorar un periodo temporal clave lograban que la Dancer's Lament funcionara tanto como una perfecta puerta de entrada a este universo fantástico para un nuevo lector (sin duda mucho más sencilla que el arranque 'a todo trapo' que marca Los jardines de la Luna), como para satisfacer a aquellos veteranos malazanos que quieren conocer más detalles del rico trasfondo histórico-legendario de la saga.
Entrando en materia confesaré que tenía muchas esperanzas puestas en esta continuación y puedo confirmar que el resultado final es más que satisfactorio. Deadhouse Landing continúa la trilogía justo un año después de los sucesos de la primera parte, cuando la extraña pareja formada por Danzante y Wu llegan hasta una remota e insignificante isla frente a las costas de Quon Tali: Malaz. Este refugio de piratas y ladrones, señoreado por Mock (un almirante corsario autotitulado grandiosamente como 'Marqués de Malaz'), se presenta como el lugar perfecto para continuar con los ambiciosos y enrevesados planes de Wu para hacerse con el poder.
Es aquí donde su camino se cruza con el de un puñado de napanianos exiliados, que han escapado de su isla natal huyendo del usurpador del trono y que ahora se reúnen alrededor de la depuesta Lady Sureth... o como la conocen todos, por su actitud siempre seria y seca, Torva. Todos juntos tratarán de hacerse un hueco en el submundo de los bajos fondos de la ciudad de Malaz, aunque cada grupo en pos de sus propio intereses. No en vano, Wu pronto se dejará seducir por el misterio que rodea a una extraña y antigua construcción de la ciudad de Malaz: la misteriosa Casa de la Muerte. Un siniestro lugar que puede ser clave para acceder a un ancestral y olvidado poder... y desde luego no hay nada que el mago de Dal Hon ansíe más.
Es aquí donde su camino se cruza con el de un puñado de napanianos exiliados, que han escapado de su isla natal huyendo del usurpador del trono y que ahora se reúnen alrededor de la depuesta Lady Sureth... o como la conocen todos, por su actitud siempre seria y seca, Torva. Todos juntos tratarán de hacerse un hueco en el submundo de los bajos fondos de la ciudad de Malaz, aunque cada grupo en pos de sus propio intereses. No en vano, Wu pronto se dejará seducir por el misterio que rodea a una extraña y antigua construcción de la ciudad de Malaz: la misteriosa Casa de la Muerte. Un siniestro lugar que puede ser clave para acceder a un ancestral y olvidado poder... y desde luego no hay nada que el mago de Dal Hon ansíe más.
—Es más fácil controlar un ciudad pequeña y una isla aislada como esta. Un excelente primer paso.
—¿Un primer paso para lograr qué?
—¿Para que va a ser? Para todo, por supuesto.
En la ciudad de Malaz también nos encontramos con otra vieja conocida de la saga: la hechicera Velajada, que aquí es la joven amante de Mock. Sus pretensiones de convertirse en reina la han llevado a utilizar sus artes mágicas para apoyar el gobierno de este pirata con ansias de grandeza. Mock está dispuesto a dejar que la ciudad sea un hervidero de ladrones, estafadores, matones y bandas criminales enfrentadas mientras todas las flotas de la isla le apoyen en sus ansias de verse reconocido como una potencia legítima más del continente de Quon Tali.
Pero esto no es todo. Y es que en esta ocasión Esslemont apuesta por una trama mucho más amplia, con diversas lineas argumentales y muchos más protagonistas en un 'dramatis personae' repleto de viejos conocidos para los lectores veteranos de Malaz. También continuaremos la historia de Dassem Ultor, la Espada Mortal del Embozado, que en Li Heng tendrá que tomar una difícil decisión en la que está en juego su fidelidad al dios de la muerte. Finalmente, la última cuota de protagonismo (y reconozco que ha sido la historia que menos me ha interesado de esta novela) es la protagonizada por Tayschrenn, un joven sacerdote de D'rek en la isla de Kartool. Su inquebrantable pragmatismo y su fe en su orden religiosa empezará a resquebrajarse a su alrededor poco a poco, llevándolo por un rumbo inesperado.
Como podéis comprobar por estas breve pinceladas Deadhouse Landing es una novela poblada de caras conocidas de la saga Malaz (y hay muchas más a lo largo de sus páginas, os lo aseguro) y de situaciones que todos hemos oído narrar a diversos personajes a lo largo de otros libros. Esto que hace que el lector se sienta como en casa y pueda disfrutar descubriendo como encajan algunas piezas de la historia temprana del Imperio que sagas como el Libro de los Caídos de Erikson o el Imperio del propio Esslemont han ido dejando caer a lo largo de sus sucesivas entregas.
Pero por supuesto el verdadero motor de la máquina sigue siendo la magnífica química que existe entre Danzante y Kellanved, siempre a un paso de matarse el uno al otro (con mucho humor de por medio), pero ambos apoyándose mutuamente en una amistad cada vez más íntima. Su búsqueda de respuestas les llevará a sumergirse de nuevo en el misterioso y peligroso mundo de Sombra, una Senda agonizante que guarda celosamente sus secretos, pero que se presenta como la forma más directa de lograr coronar sus ambiciones.
Lo más llamativo del libro, sin embargo, es que se queda corto y el lector termina sus 380 páginas con la sensación (y las ganas) de que la trama podría haberse desarrollado por bastantes más. Los personajes y la historia tiene el suficiente peso y enjundia como para 'aguantar' un mayor desarrollo, así que es la primera vez que tengo la sensación de que una novela de Malaz se me ha quedado corta, que es la única pega que le pondría a esta segunda novela.
Pero por supuesto el verdadero motor de la máquina sigue siendo la magnífica química que existe entre Danzante y Kellanved, siempre a un paso de matarse el uno al otro (con mucho humor de por medio), pero ambos apoyándose mutuamente en una amistad cada vez más íntima. Su búsqueda de respuestas les llevará a sumergirse de nuevo en el misterioso y peligroso mundo de Sombra, una Senda agonizante que guarda celosamente sus secretos, pero que se presenta como la forma más directa de lograr coronar sus ambiciones.
Lo más llamativo del libro, sin embargo, es que se queda corto y el lector termina sus 380 páginas con la sensación (y las ganas) de que la trama podría haberse desarrollado por bastantes más. Los personajes y la historia tiene el suficiente peso y enjundia como para 'aguantar' un mayor desarrollo, así que es la primera vez que tengo la sensación de que una novela de Malaz se me ha quedado corta, que es la única pega que le pondría a esta segunda novela.
Con Deadhouse Landing Ian C. Esslemont sigue demostrando que sabe explotar el potencial de unos personajes y un momento clave en la historia del universo fantástico de Malaz. Una segunda novela que gana tanto en dimensión como en protagonistas, con numerosos guiños al lector veterano y con numerosos acontecimientos claves de los que hemos oído hablar a lo largo del Libro de los Caído o el Imperio de los que ahora seremos testigos de primera mano. Una trama donde se mezclan las luchas callejeras a cuchillo, la piratería, grandes batallas navales, la exploración de los secretos de las Sendas mágicas y donde hacen acto de presencia los poderosos y entrometidos Ascendientes para crear un magnífico entretenimiento en el que Kellanved y Danzante se alzan como los verdaderos señores de Malaz. Literal y figuradamente.
VALORACIÓN 10/10
FICHA
Deadhouse Landing (Path to Ascendancy, 2)
Ian C. Esslemont
Bantam Press
400 páginas, tapa dura con sobrecubierta
Por lo que comentas, unos acortan tramas que dan para más, mientras que otros (Rothfuss) estiran el chicle más de la cuenta.
ResponderEliminarImportantes ganas tengo de meterme con esta saga. A ver si Nova termina "El Libro de los Caídos" y se pone con "El Imperio" para luego meterse con las precuelas.
Un lore bestial, una historia épica y llena de matices... Tiene todo lo que busco en la fantasía. Lástima que no me atreva a empezarla en inglés...
¡Hola Jorge! Pues si, afortunadamente para los que seguimos Malaz además tanto Erikson como Esslemont mantienen un gran ritmo de escritura y publicación, por lo que cada poco tiempo hay una nueva novela para disfrutar.
EliminarEsperemos que Nova siga apostando por la saga y traiga más libros.
Saludos!
Que mala es la envidia...Con lo bien que me caes y ahora mismo te odio XD
ResponderEliminarSaludos y muy buena reseña.
Odio comprensible xD
EliminarA ver si pronto Nova nos alegra con más traducciones de la saga, esta trilogía en particular es mucho más asequible para cualquier lector, incluso uno que quiera empezar en Malaz de cero.
Saludos y gracias por comentar!
Estamos ávidos de noticias de malaz , muchas gracias por traerlas y por darles este tratamiento tan cuidado . Un saludo
ResponderEliminarGracias por seguir el blog, Ethoos. A ver si Nova se anima también con esta trilogía, que al ritmo que lleva Esslemont el año que viene la habrá terminado.
EliminarSaludos!