La última novela de Kim Stanley Robinson nos llega este mes de junio de manos de la editorial Minotauro. El aclamado autor de la trilogía marciana regresa a las librerías con El ministerio del futuro, novela donde nos muestra la lucha de la humanidad contra los efectos del cambio climático en futuro muy, muy cercano. No en vano la obra está ambientada en 2025, lo que le permite al autor de Illinois tratar algunos de sus temas predilectos como son el difícil equilibrio entre naturaleza y cultura, el precio de la sustentabilidad ecológica o la amenaza del calentamiento global, todo ello narrado a través de testimonios ficticios en primera persona. La novela (que está nominada a los Locus 2021 en la categoría de mejor obra de ciencia ficción) se pone a la venta este 23 de junio, con la traducción de Simon Saito y las características que tenéis a continuación.
El ministerio del futuro se publica en tapa blanda con solapas, tiene 496 páginas y se puede comprar por 21,95 euros.
SINOPSIS
El Ministerio del Futuro una obra maestra de la imaginación. Narra a través de testimonios ficticios cómo nos afectará a todos el cambio climático. Su visión no es la de un mundo desolado y apocalíptico, sino la de un futuro que ya se nos echa encima… y cuyos desafíos tal vez consigamos superar por los pelos.Es una novela actual e impactante, descorazonadora y esperanzadora a partes iguales, y es uno de los libros más poderosos y originales que jamás se hayan escrito sobre el cambio climático.Creado en el año 2025, el objetivo del nuevo organismo era sencillo: defender a las futuras generaciones de la humanidad y proteger a todos los seres vivos, del presente y del futuro. Enseguida empezó a ser conocido como el Ministerio del Futuro, y esta es su historia.Narrada enteramente a través de los testimonios de testigos directos ficticios, El Ministerio del Futuro es una obra maestra de la imaginación, el relato de cómo el cambio climático nos afectará a todos a lo largo de las próximas décadas.
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No ebook, no deal. Y mira que me apetece. Pero así no. ¡Salud!
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