SINOPSIS: Esta es la historia de cómo reunimos a las huestes de los pueblos libres para arrasar la gran colonia, de cómo recorrimos el desierto del mediodía en una caravana de escorpiones, en una alfombra voladora, en el desert express o surcando las corrientes freáticas que conectan los oasis. Y de la batalla del amanecer eterno, que remató nuestro periplo con gloria y muerte, y que trató de cambiarlo todo para siempre.
RESEÑA: La trilogía de los Ojos Bizcos del Sol, la saga de ciencia ficción de Emilio Bueso definida como 'biopunk' llegaba a su fin el pasado 2020 con este esperado Subsolar. Lo cierto es que si algo había logrado el autor castellonense con sus dos entregas anteriores es meterse al lector en el bolsillo para guiarlo por una odisea tan sorprendente como poco previsible. Tanto su primera entrega (Transcrepuscular) como su continuación (Antisolar) se convertían en imparables trenes a todo trapo, que llevaban al lector través de una sorprendente y seductora ambientación, acompañando a unos personajes poco convencionales. Todo ello en un mundo poblado de moluscos simbióticos y climas imposibles, de culturas tan dispares como pasmosas, en un relato donde se mezcla aventuras, crítica social y mucho humor cafre.
Ambos volúmenes de la saga de Bueso concluían con unos finales tan bruscos que dejaban al lector con ganas de agarrar inmediatamente el siguiente volumen para poder seguir acompañando al Alguacil, al Trapo, la Regidora, Wing Melin, Pico Ocho y compañía. Si el primer libro mantenía en vilo a lector con su nebulosa mezcla de fantasía y ciencia ficción, y el segundo nos lanzaba de cabeza hacia la 'space opera' más aventurera, para el tercer volumen Bueso decide meternos de lleno en un western fantástico descarado. Los héroes se encuentra ahora en el Desierto del Mediodía, la cara más expuesta al sol de este extraño planeta, lo que nos lleva a un desolado mundo de arena, de ciudades aisladas, donde los asentamientos de los oasis y los caravasares que son la única prueba de que sigue existiendo civilización. O al menos algo salvaje y anárquico que puede acercarse a lo que llamaríamos civilización.
Bueso juega con los tópicos del western (desde tabernas polvorientas a despiadados duelos a revólver) para entrelazarlos con los de una rebelión contra el orden establecido liderado por nuestro heterogéneo grupo de protagonistas. Y es que el alzamiento del Amanecer Eterno tratará de unir las dispares fuerzas que pueblan los distintos lugares del Círculo crepuscular para acabar por fin con el dominio absoluto de la Gan Colonia. Una gran batalla final, tanto física como ideológica, donde los distintos bandos (que no necesariamente son dos) ponen sobre la mesa el abismo que los distancia. Y es que el conflicto existencial entre los devotos al sistema simbiótico y aquellos que los que lo consideran una reprobable y bárbara forma de existencia solo podrá resolverse con las armas y en el campo de batalla.
"Me supe, más que nunca, entre dos mundos en guerra. Entre dos culturas que tenían todos los errores en común y que vivían separadas por los tres ojos bizcos del sol."
Por supuesto la gran rebelión y el épico combate final que nos ofrece la novela de Bueso llega trufado de su vistoso universo de seres humanos simbiotizados, escorpiones y cangrejos gigantes, y criaturas conchudas o con caparazón que sigue fascinando por lo singular y bizarro (en su primera acepción) de su planteamiento. Subsolar también sirve para despejar de forma definitiva muchas de las dudas y los misterios que se habían sembrado en las dos primeras entregas de la saga, en especial sobre la conflictiva relación milenaria que se vive en este mundo crepuscular entre la Gran Colonia y los Antiguos.
El libro sigue engrasando sus engranajes con grandes dosis de un humor gamberro y crudo, rayano en ocasiones con el absurdo, y en otras de codazo directo de complicidad con el lector. Todo ello cortesía de personajes como el simpar Trapo, Pico Ocho o Angus, o incluso de la nueva incorporación de la banda: la joven esferista Ayse, que deambula entre lo misterioso y lo jovial. Por su parte el deslenguado y sinvergüenza Trapo encuentra un nuevo huésped que colonizar, un pistolero con las capacidades mentales mermadas pero con una puntería envidiable llamado Duplo Jack. Seremos testigos de todo ello desde el punto de vista del Alguacil, cada vez más seguro en su camino hacia la libertad individual, rompiendo las cadenas de la tradición y la cultura que parecían constreñirlo durante gran parte de los libros previos. Claro que no hay nada más peligroso que la libertad individual, que permite descubrir las mentiras que compartimos para mantener en marcha la sociedad.
Hay que aplaudir la valentía de Bueso de buscar un estilo tan propio como llamativo, que hace que la lectura siempre tenga al lector pegado a la página pero sin ser capaz de descubrir que es lo que espera a la vuelta de la misma. Su narración concisa pero ágil, preñada de un humor tan cafre como certero y con una contundente imaginería se mantiene en pie con firmeza y brío hasta la última línea. Al mismo tiempo Subsolar sigue gozando de una trama ágil y directa, donde la interacción de los múltiples personajes mantiene en marcha la locomotora de la acción casi sin un solo momento descanso.
Respecto al desenlace final de la saga y sin entrar en destripes que no aportan nada, tras la lectura de los dos volúmenes anteriores no es ninguna sorpresa que la visión de Emilio Bueso sobre el comportamiento humano sea tan pesimista como realista (en realidad, dos caras de una misma moneda según como de lleno vea uno el vaso). El final es tan contundente como apropiado, que nos devuelve de golpe al frío utilitarismo con el que los grandes poderes (religiosos, políticos o empresariales) son capaces de desactivar los vigorosos movimientos sociales o revolucionarios que pretenden acabar con cualquier orden establecido.
El volumen final de la trilogía de los Ojos Bizcos del Sol es un relato tan alocado como sus dos entregas precedentes, una atrevida propuesta donde los personajes, la ambientación y la acción se dan la mano para arrastrar al lector página tras página. La rebelión contra el poder milenario de la Gran Colonia es el trasfondo de una narración donde las diferentes formas de entender la vida en el Círculo crepuscular por fin chocan frontalmente. El épico combate final contra las inteligencia enjambre de la Gran Colonia se convierte en una lucha de ideologías donde los cadáveres de los inocentes y el idealismo serán la cosecha más abundante. El Alguacil se pondrá en primera línea de dicha lucha, cada vez más lúcido ante la realidad que lo ha rodeado durante toda su vida y de la que apenas había sido consciente. Subsolar logra concluir con acierto una saga que al tiempo que transporta al lector a un universo tan original como llamativo, logra hacerle reflexionar sobre posibles futuros para la raza humana, la interacción entre culturas en distintos estadios de desarrollo tecnológico o el valor de la libertad individual frente al dominio de los grandes poderes religiosos, políticos o económicos.
VALORACIÓN
OTRAS RESEÑAS
FICHA
Subsolar (Los Ojos Bizcos del Sol, 3)
Emilio Bueso
Gigamesh
Tapa dura, 384 páginas
36 euros
Bufff para mi deja bastante que desear la novela.
ResponderEliminarFuerza mucho el lenguaje de los personajes y mete
formas diferentes de escribir con calzador.
2 sobre 5