Reseña: Shock, de Richard Matheson

SINOPSIS: Antología de relatos de Richard Matheson en 4 tomos. Tenéis el listado completo de los relatos incluidos en cada uno de los cuatro tomos en esta entrada.

RESEÑA: Es casi imposible no haberse topado nunca con una historia surgida de la imaginación del prolífico Richard Matheson, y es que el escritor norteamericano dejó de su huella en multitud de producciones audiovisuales y son centenares las películas o series que beben de sus relatos. Y precisamente son sus cuentos de horror los que la editorial Gigamesh nos trae recopilados en la colección Shock, cuatro volúmenes que reúnen un total de 53 relatos y novelas cortas donde el autor nos sumerge en su particular universo de terrores cotidianos y horrores ocultos a plena vista.

Matheson no busca un terror sobrenatural o excepcionalmente ajeno al ser humano, y eso es lo que nos hace estremecernos con cada una de sus historias. Sus terrores y amenazas están a la vuelta de la esquina, son tramas y planteamientos que al leerlos podemos imaginarnos fácilmente envueltos nosotros mismos en dichas situaciones. Y es que como el propio Matheson explicaba en el volumen de Pesadilla a 20.000 pies en uno de sus comentarios sobre sus propios relatos: "Así es el mal en realidad. No se trata de monstruos, ni de demonios, ni de esa clase de cosas. Es lo que ocurre todos los días en nuestro propio vecindario".

Los tres volúmenes de Shock más el cuarto tomo, titulado Ondas de shock (que incluye algún relato que estaba inédito en español), recopilan historias cortas de una gran variedad temática, de estilo y de enfoque, pero todas ellas comparten una premisa muy clara: esto podría pasarle a usted. Con una visión irónica y cargada mucha mala leche el autor de Nueva Jersey nos muestra el 'American Way of Life' de una forma retorcida y cargada de humor negro, donde lo perturbador encuentra refugio en los barrios más acomodados, tiene el rostro abúlico del vecino de al lado, nos lo encontramos en el aburrido trabajo, se esconde en la cabina de un camión cualquiera o llega para perturbar la paz de familias en apariencia idílicas. Sus historias mezclan de una forma tan sencilla como efectiva lo cotidiano, lo terrible, lo perturbador y la comedia negra, en un reflejo retorcido y aterrador de las vidas rutinarias que tenemos y que en estas páginas nos muestra como pueden trastocarse de forma imprevista al toparse de cara con el horror más inesperado.

Richard Matheson sabe como atrapar al lector desde el primer párrafo, presentándonos casi siempre ideas de lo más sencillas pero que nos golpean con fuerza, arrastrándonos página tras página sin remedio y casi sin darnos cuenta. Ejemplos soberbios de ello lo tenemos en algunas de las joyas repartidas en estos 4 volúmenes, donde planteamientos simples nos desvelan realidades perturbadoras: Los hijos de Noah (un detención de tráfico que acaba en un banquete caníbal), Conferencia telefónica (una magistral muestra de tensión creciente con anciana que recibe inesperadas y siniestras llamadas), Un poco de agua (donde el autor consigue que el lector tenga el corazón en un puño siguiendo la odisea de un joven que sale del cine con sed y trata de encontrar un poco de agua en una noche de verano), Los vampiros no existen (una cruel reinvención del horror gótico vampírico), La chica de mis sueños (donde un miserable que extorsiona a familias a costas de las trágicas visiones proféticas de su novia recibe su justo castigo), Grillos (con un hombre obsesionado con los ruidos de estos insectos en los que cree haber descubierto un siniestro secreto), o el celebérrimo Pesadilla a 20.000 pies. 

El escritor también tiene hueco en sus relatos para los terrores más clásicos, para los fantasmas, los fenómenos paranormales, las capacidades que sales de lo normal, los viajes en el tiempo o los futuros apocalípticos y distópicos, a los que Matheson aporta un refrescante soplo de aire fresco gracias a la visión irónica o cargada de humor negro que siempre destila la obra del escritor americano. También hay lugar para los relatos más ligeros o de menor impacto donde Matheson nos ofrece historias con una vertiente más cómica o buscando la simple sorpresa final, haciendo que la rutina se vuelva el cóctel donde surge la visión irónica y crítica hacia los comportamientos humanos.

Cabe destacar también el marcado trasfondo erótico de algunos de sus relatos, con la inclusión de personajes femeninos sumamente hermosos y siempre muy sexualizados, consecuencia directa de haber sido publicados en su época en la revista Playboy. Pero por suerte para el lector no se quedan ahí, porque Matheson nos ofrece siempre una visión siniestra o cargada de humor negro de las relaciones humanas que golpea directamente en el estómago a la visión idílica que nos ofrece el cine o la televisión de la época.

Lo que no cambia es que gran parte del éxito narrativo de sus relatos y cuentos recae en lo visuales que son todas y cada una de sus historias, lo que también explica la facilidad con la que podían ser trasladadas a la pantalla (grande o pequeña). Los cuatro tomos de relatos de horror publicados por Gigamesh muestran así una variada selección de enfoques y estilos, con multitud de temas que hacen que sea como pasear por una feria de los horrores donde nos topamos cara a cara con lo inesperado, lo inexplicable y lo terrible. Con sitio también para el humor negro y la crítica social más despiadada, Matheson no deja títere con cabeza en su repaso a los miedos, anhelos, sueños y temores de la sociedad moderna. Sus personajes acaban topándose con una realidad inesperada y escalofriante, en situaciones en las que no nos cuesta imaginarnos y que es lo que hace que sus relatos sigan siendo tan perturbadores hoy en día.

EN CONCLUSIÓN:

Los cuatro tomos de Shock nos ofrecen así un apasionante recorrido por la visión de un maestro del relato corto, con horrores cotidianos que perturban y conmueven al lector por su cercanía al día a día. Lo horroroso/asombroso/terrorífico encuentra acomodo en las situaciones y ambientes más normales, perturbando para siempre las vidas de los protagonistas... y de aquellos que nos sumergimos en las páginas creadas por Richard Matheson sin poder abandonarlas. Una antología que nos golpea con píldoras breves y contundentes, que se devora a un ritmo implacable gracias a la maestría con la que el escritor de Nueva Jersey se mete en el bolsillo a un embelesado lector que pide más y más, y que no saldrá decepcionado de las páginas de este imprescindible selección de horror en formato corto.

VALORACIÓN

FICHA

Shock 1, 299 páginas (6 euros)

Shock 2, 235 páginas (6 euros)

Shock 3, 293 páginas (6 euros)

Ondas de shock, 265 páginas (7,50 euros)

Richard Matheson

Gigames

Tapa blanda de bolsillo

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