jueves, 3 de marzo de 2022

Reseña: El demonio de Próspero, de K. J. Parker

SINOPSIS: Los puede oler, sentir… cuando un demonio está cerca, no se le escapa nunca. Y si para expulsarlo del cuerpo que ha poseído tiene que sacrificar al huésped… bueno, eso no es problema. Este es el protagonista narrador de El demonio de Próspero, un exorcista tremendamente eficaz y sin demasiados escrúpulos.
Y sí, Próspero de Schanz es un filósofo, científico, artista… el hombre más sabio de todos los tiempos y se ha propuesto educar al recién nacido príncipe para que sea el mejor gobernante de la historia. Lástima que esté poseído por un demonio.
K. J. Parker nos invita en esta novela corta a dialogar con el demonio, a pensar sobre el bien y el mal, sobre qué es moral o amoral. Una novela que destila ironía, con varios niveles de lectura que deleitará al lector más exigente.


RESEÑA: Los lectores españoles hemos recuperado este año en nuestro idioma a uno de los autores más prolíficos de la literatura fantástica en inglés. Se trata de K. J. Parker, ganador de dos premios World Fantasy, que regresa gracias a la nueva editorial Red Key Books que debuta en nuestras librerías con El demonio de Próspero. Una novela corta, con una extensión menor a las cien páginas, donde Parker desata su mala leche y humor negro para ponernos en la piel de un exorcista muy poco convencional, condenado a enfrentarse una y otra vez a los mismos demonios que asedian a los pobres humanos.
Narrada en primera persona, su protagonista sin nombre nos va contando su experiencia ‘laboral’ como exorcista dedicado a perseguir a los entes demoniacos que torturan a la humanidad desde tiempo inmemorial. Dotado desde la infancia del don (o la maldición, como nos dejará claro en repetidas ocasiones) de percibir a estos seres infernales y de poder expulsarlos de los cuerpos que torturan, este expeditivo exorcista se ha convertido en el más dotado de su particular gremio. Como estos demonios no pueden morir, nuestro protagonista está condenado a encontrarse una y otra vez con los mismos seres haciendo pasar por el mismo infierno a diversas personas. 
“Hago cosas terribles. A mis enemigos, a los de mi propio bando, a mí mismo. Con ello salvo a un gran número de desconocidos de lo peor que le puede acaecer a un ser humano. Me gustaría decir que lo hago porque soy uno de los buenos, pero si lo dijera me calaríais de inmediato.”
A lo largo de esta breve pero atrayente historia su protagonista nos irá explicando diversos momentos clave de su vida anterior, que nos ayudarán a entender su actual situación y lo que lo ha convertido en la persona que es ahora. Todo ello en una narración cargada de humor negro, ironía y cinismo, que rompe la cuarta pared narrativa en varias ocasiones para interpelar de forma directa al lector, que acaba sintiendo una profunda simpatía por el cínico y amoral exorcista protagonista.
Y es que, sin duda, es el protagonista sin nombre de El demonio de Próspero el que hace tan sumamente divertida esta novela corta, que se devora en un suspiro. Como ya he señalado se trata de un hombre cínico, descreído y amoral, al que toda una vida de hacer lo mismo lo ha convertido en un exorcista sin escrúpulos dispuesto a todo con tal de acabar con sus enemigos. Vamos, uno de esos que pone por delante el fin sin importar los medios. Todo ello transcurre en un mundo de apariencia levemente barroca, que nos recuerda a los siglos XVI o XVII europeos, en una sociedad conformada por principados y cortes burocráticas donde nuestro protagonista se mueve como pez en el agua gracias a su descaro y pocos escrúpulos.
“A veces me pregunto si lo que me mueve no será más el odio hacia Ellos que el amor a mis congéneres humanos. Pero nadie me paga por este tipo de reflexiones, así que no me lo pregunto con frecuencia.”
Durante su enfrentamiento con las huestes demoniacas acabará cruzándose con el petulante y engreído Próspero de Schanz, el sabio más reconocido de su época. Elegido como el preceptor del futuro príncipe, Próspero pone la razón y las artes por delante de todo, despreciando a los exorcistas y descartando la existencia de los demonios como algo propio de ignorantes. Pero su relación con nuestro descarado protagonista trastocará su existencia y hará que la situación en el principado se vuelva explosiva para todos los implicados. Esto genera un tira y afloja muy interesante entre nuestro protagonista y el engreído sabio, que acabará desembocando en un final quizá demasiado brusco para mi gusto pero que sin duda logra sorprender al lector, que cerrará la novela corta con gesto bastante estupefacto en su rostro.

EN CONCLUSIÓN: K. J. Parker nos deja una novela corta cargada de ironía y mala leche para meternos en la piel de un exorcista muy poco convencional. El demonio de Próspero nos presenta a un narrador-protagonista descreído, cínico, amoral y sin escrúpulos, dispuesto a arrancar a los demonios de las almas humanas al precio que sea. Un personaje lleno de claroscuros que se gana al lector y se lo mete en el bolsillo mientras le pone al día de sus andanzas, y asistimos a su duelo interminable con las huestes infernales que se ceban con la humanidad. Al cruzarse con el petulante y engreído Próspero de Schanz, sus dos personalidades contrapuestas se convierten en los polos de un interesante duelo de inteligencias y orgullos, donde lo que está en juego es si salen adelante o no los planes demoniacos para acabar con toda la humanidad.


VALORACIÓN

FICHA
El demonio de Próspero
K. J. Parker
Red Key Books
Traducción de María Pilar San Román
Tapa blanda con solapas, 98 páginas
14,96 euros

3 comentarios:

  1. Mi gesto estupefacto fue la mandíbula descolgada. Para lo cortito que es, lo he disfrutado mucho

    ResponderEliminar
  2. Muchas gracias por la reseña y me alegra mucho que alguna editorial haya retomado la tarea de traducir a K. J. Parker, que es el tipo de escritor que si te tomas la fantasía en serio tienes que leer, sí o sí. Ojalá se venda bien y decidan traducir The Folding Knive, que es su mejor novela independiente.

    ResponderEliminar
    Respuestas
    1. Gracias a ti por pasarte, ojalá la editorial sigue con Parker porque esta primera muestra de su obra es muy interesante

      Eliminar