jueves, 22 de septiembre de 2022

Reseña: Las crónicas de Excálibur

SINOPSIS: El mago Merlín recibe de manos de la Dama del Lago la legendaria espada Excálibur, capaz de dar la victoria al guerrero que la esgrima. Merlín decide entregarla a Uther Pendragón, el líder de los britanos, con la condición de que la use para conseguir la unión de todos los pueblos de Bretaña... y sin darse cuenta pone en marcha una serie de acontecimientos que cambiarán para siempre la historia del mundo. Jean-Luc Istin y Alain Brion nos narran los primeros años de la leyenda artúrica, dotándola de una original visión historicista y reflejando a los grandes personajes que forman parte del folclore europeo, como Merlín, Morgana o el mismo rey Arturo, con viñetas que son verdaderas obras de arte.
Podéis ver fotos de la edición en español en mi Instagram.


RESEÑA: El mito artúrico sigue siendo uno de los combustibles que siguen alimentando novelas, películas o series, y por supuesto también el mundo del cómic. Una buena prueba lo tenemos en Las crónicas de Excálibur, la novela gráfica de Jean-Luc Istin y Alain Brion. Con guion del primero y arte del segundo, esta pareja de franceses reconstruyen la historia de la espada más célebre de las leyendas de Britania. Y lo hacen mezclando mitos con la realidad histórica, aprovechando la ambientación de la época de los reinos britanos para narrarnos la vida de Uther Pendragón y su afamado hijo, Arturo.
Esta ‘Primera crónica’ (de los tres volúmenes que conforman la historia completa y que publica en español Yermo ediciones) arranca con Merlín obteniendo la mítica espada de la dama del lago. El hechicero pone en marcha entonces su plan de tratar de convertir al caudillo guerrero Uther Pendragón en el Gran Rey que unifique Britania y traiga una era de paz. Para ello tendrá que guiar al impulsivo guerrero, convirtiéndolo en un rey sabio y justo capaz de liderar a los britanos para enfrentarse a los invasores pictos, gaélicos, escoceses y sajones.

Todo se entremezcla con una magia viva y unos dioses ancestrales que todavía dejan sentir su poder. Muestra de ello la tenemos en la propia Excálibur, la espada otorgada por la Gran Diosa, o a través de Avalón, la isla donde Viviana adiestra a las damas que se convierten en consejeras de señores y caudillos de Britania, capaces de utilizar una magia que se va desvaneciendo del mundo.
El cómic se cimenta en una ambientación en la que Britania todavía siente las huellas del extinto dominio romano (no en vano se nos dice que Uther es hijo del emperador Constantino II) y donde ha empezado a extenderse el cristianismo, aunque todavía en dura pugna con las creencias paganas. De hecho este es uno de los temas centrales del cómic, con el intransigente obispo Patricio dispuesto a borrar toda huella de las antiguas creencias para introducir la fe en Cristo al precio que sea y convertido en enemigo irredento de Merlín, Viviana y demás conservadores de las viejas tradiciones.
Mientras tanto, los antiguos dioses todavía dejan sentir su presencia en el mundo físico, desde la Gran Diosa creadora de Excálibur hasta al dios picto Cernunnos, capaces de intervenir en el devenir de la historia. Y es que como decía arriba el guionista mezcla así una ambientación seudohistórica con elementos mágicos y legendarios, donde los personajes interactúan con estos dioses o perviven todavía seres como los gigantes. Esto le otorga mucha riqueza a todo el cómic, que entre combates, pasiones, engaños, muertes y amoríos nos permite revivir el surgimiento del mito. 


Con protagonistas tan conocidos como Merlín, Viviana, Uther Pendragón, Igraine, Morgana o Arturo así como también personajes inventados para la ocasión como el obispo Patricio, el rey Gorlois o el rey Bran. Y es que el guionista usa con libertada las bases del mito artúrico para manejarlo a su antojo, cambiando algunas relaciones entre personajes y el desarrollo de su evolución. Eso le permite mantener la frescura de una historia contada en repetidas ocasiones y sorprender al lector en ciertos momentos, así como crear tramas con la suficiente libertad como para que se siente viva.

El primer tomo de Las crónicas Excálibur nos presenta el origen de la célebre espada, sacada de las aguas por Merlín para tratar de unir a los pueblos de Britania. Una recreación del mito artúrico que con mucha libertad y cambios sirve para contarnos las legendarias vidas de Uther (en este primer tomo) y del rey Arturo (en los dos tomos restantes de la serie. En una Britania que se mueve entre lo seudohistórico y lo mágico, con Merlin, Uther, Viviana, Igraine y Morgana convertidos en los principales protagonistas de una historia llena de batallas, luchas, amoríos, muertes, traiciones, choques culturales y religiosos. Con guion de Jean-Luc Istin y el arte de Alain Brion, Las crónicas de Excálibur nos llega en la cuidada edición de Yermo ediciones que nos deja disfrutar de la legendaria historia en un volumen de gran formato (32cm x 23cm) en tapa dura.

VALORACIÓN

FICHA
Las crónicas de Excálibur 1
Guion de Jean-Luc Istin, ilustraciones de Alain Brion
Yermo ediciones
Tapa dura, 128 páginas
30 euros



COMPARTIR en

2 comentarios:

  1. La verdad es que tiene pintaza. Y los dibujos son muy interesantes. Habrá que hincarle el diente.

    ResponderEliminar
  2. Bueno cuando salió me lo compre pensando que sería la historia más o menos original contada en el lenguaje del cómic y como no tenía nada Arturico pique. Luego la historia se separa mucho de la original hasta ser un gran what if. Leedañla si buscáis eso, un what if.

    ResponderEliminar