La sexta temporada ha terminado dejándonos el episodio más largo de la historia de Juego de tronos, y sin embargo seguro que a muchos de vosotros os ha sabido a poco. La serie de HBO ha dado una auténtica patada en la mesa que revoluciona la situación tanto en Poniente como en Essos y nos deja un tablero de juego altamente combustible para la próxima temporada. Una guerra con bandos bien definidos en el sur (Lannister-Frey-¿Euron? contra Targaryen-Greyjoy-Tyrell-Martell), un Norte en el que podría estallar un conflicto fratricida entre los hermanos Stark y con la terrible amenaza de los Otros a punto de alcanzar (y sin duda, sobrepasar) el Muro. Por eso mismo los guionistas han aprovechado para cerrar definitivamente muchas de las tramas que nos han acompañado durante este sexto año, dejándonos un último episodio con un gran ritmo y realmente interesante, un notable muy alto que ha sido una magnífica despedida para esta sexta temporada.
¿Vemos lo que nos ha dejado estos Vientos de invierno?
¿Vemos lo que nos ha dejado estos Vientos de invierno?
DESEMBARCO DEL REY. Como bien sospechábamos todos la maquiavélica Cersei y su compiche Qyburn se traían algo preparado para evitar el Juicio de la Fe y ¡¡vaya bombazo se han guardado!! Mientras el Gorrión Supremo ha aprovechado para humillar de nuevo a la casa Tyrell (y volver a recordarnos la triste trayectoria que ha tenido el Loras de la serie, una burda sombra del novelístico), la leona ha fundado el 'Frente de Liberación de Cersei', un grupo terrorista ponienti que no duda en atentar en el lugar más sagrado de Desembarco del Rey para acabar con todos sus enemigos.