Reseña: La plegaria de la calle, de Gareth Hanrahan

SINOPSIS: En la antigua ciudad de Guerdon, tres ladrones -un huérfano, un ghoul y un hombre maldito- han sido acusados de un crimen que no cometieron. Su búsqueda de venganza sacará a la luz una peligrosa conspiración, cuyas semillas fueron sembradas mucho antes de que ellos nacieran. 

Una guerra mágica de siglos de antigüedad está a punto de volver a encenderse y en los túneles que se encuentran en las profundidades de la ciudad se agita un malévolo poder. Solo permaneciendo juntos los tres amigos podrán evitar un conflicto que traería una devastación total a su ciudad, y al mundo de más allá.

[Aquí todos los detalles de la edición en español: La plegaria de la calle.]

RESEÑA: El pasado enero debutó en la literatura fantástica Gareth Hanrahn, que hasta ahora se dedicaba a la creación y escritura de manuales de juegos de rol, y que tenía por delante la difícil tarea de demostrar que estaba dispuesto a ir más allá del mero pastiche fantástico. Y lo cierto es que con The Gutter Prayer el joven autor irlandés construye una novela fascinante y ágil, que atrapa al lector desde su primera página, que lo sumerge en un mundo oscuro y realista pero al mismo tiempo repleto de los llamativos elementos habituales del género (magia, dioses sedientos de sangre, bajos fondos, ladrones callejeros, hechiceros,...) manejados todo con la suficiente originalidad para resultar una lectura cautivadora.

La grandiosa ciudad de Guerdon es un hervidero de tensiones, donde los dioses sedientos de sangre del pasado y la magia conviven con el tranvía y los poderosos gremios económicos. La Guerra de los Dioses todavía no ha llegado a ella, y gracias a ello su magos, hechiceros y alquimistas se están lucrando creando todo tipo de armas mágicas. En sus bajos fondos, los ladrones y maleantes tratan de sobrevivir como pueden.

La novela nos presenta a tres de estos ladronzuelos, muy diferentes pero que conforman una extraña familia: la joven Carillon Thay, que escapa de un pasado sangriento; Spar, hijo del anterior señor de los bajos fondos y ahora condenado en vida por la enfermada que lo está convirtiendo poco a poco en piedra; y Rat, un ghoul que ha dejado los subterráneos de Guerdon para tratar de vivir en sus calles como un ciudadano más.
Con estos tres personajes iniciales Hanrahan empieza a construir una historia donde nada es lo que parece, con una convulsa urbe repleta de misterios y con una historia milenaria clave para entender su presente. Lo que un principio era un simple golpe que sale mal, empieza a revelarse como un oscuro plan para subvertir el orden establecido. La trama nos irá presentando a nuevos personajes (el implacable cazarrecompensas Jere, la cándida Eladora o el misterioso profesor Ongent), que mantienen en pie una historia muy coral y repleta de sorpresas. El escritor irlandés construye una novela que logra mantener un ritmo ágil, al mismo tiempo que va profundizando en la historia y las motivaciones de los diversos personajes. Todos sus protagonistas, no importa la manera o el punto en que arranque su trama, muestran una evolución y un desarrollo que no me queda más remedio que aplaudir, y al mismo tiempo Hanrahan logra que todos aporten algo a la trama general o la historia de los demás personajes.

"Créeme, hay cosas ahí abajo que no quieres ver. Cosas que no debes ver, también. Si traes esa lámpara, perderás tus ojos."

Pero sin duda el personaje más fascinante de toda la novela es la propia urbe de Guerdon, un lugar con milenios de historia, lleno de criaturas extrañas y seres creados por la magia (desde los siniestros Hombres de cera que "mantienen el orden" a los extraños hombres gaviota fruto de experimentos desastrosos), pero donde también hay lugar para los avances tecnológicos como el tranvía o las primeras industrias. Bajo su superficie se esconde un gigantesco entramado de túneles milenarios donde los ghouls se alimentan de los muertos, y donde oscuros y terribles dioses aguardan, acechando para regresar.
Toda la novela mantiene un ritmo dinámico, que obliga al lector a seguir avanzando sin remedio, y que durante su último tercio se convierte en una montaña rusa imparable. The Gutter Prayer es un magnífico debut, plagado de todo lo que hace maravillosa la fantasía: una ambientación potente, unos personajes que se ganan al lector, continúas sorpresas y un trasfondo donde se enfrentan los poderes económicos, políticos y religiososo. La ciudad de Guerdon se convierte en un entorno fascinante, repleto de antiguos cultos, dioses oscuros, hechiceros de dudosas intenciones, criaturas ávidas de carne humana o seres monstruosos usados como fuerzas del orden. Todas y cada uno de sus personajes se ganan al lector y logran mantenerlo enganchados a sus desventuras, mientras trata de intentar desvelar el oscuro secreto que acecha en los callejones de los bajos fondos, bajo los campanarios de los grandiosos templos y en el interior de las fábricas de Guerdon. Aunque la novela tiene un final lo suficientemente autoconclusivo para leerse de forma independiente, deja abierta la puerta para las siguientes entregas de la saga. Desde luego Gareth Hanrahan me ha ganado para su causa y puede tener por seguro que estaré esperando con ansia las siguientes novelas de The Black Iron Legacy.

VALORACIÓN

FICHA

La plegaria de la calle (El Legado del Hierro Negro, 1)

Gareth Hanrahan

Gamón Fantasy

Traducción de David Tejera

Tapa dura con sobrecubierta, 526 páginas

22 euros (en ebook por 6,64 euros)

A la venta en Amazon

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