SINOPSIS: Tras El problema de los tres cuerpos y El bosque oscuro, la tensa espera de la humanidad concluye ahora con un último episodio, tan extraordinario como los anteriores, lleno de ideas electrizantes y una calidad de obra maestra.
Ha pasado medio siglo de la batalla del Día del Juicio Final y la Tierra goza de una prosperidad sin precedentes gracias al conocimiento transferido por Trisolaris. Mientras la ciencia humana avance y los trisolarianos adopten la cultura terrícola, ambas civilizaciones podrán convivir sin temor a ser destruidas. Pero con la paz la humanidad se ha vuelto autocomplaciente. Después de una larga hibernación, Cheng Xin, una ingeniera aeroespacial de comienzos del siglo XX, despierta en esta nueva era. Su mera presencia, sumada a cierta información sobre un proyecto olvidado desde el principio de la Crisis Trisolariana, podría alterar el frágil equilibrio entre ambos mundos... ¿Alcanzará el ser humano las estrellas, o morirá en su cuna?
El fin de la muerte, galardonado con el Premio Locus 2017 y nominado al Hugo 2017, es el desenlace de la magistral trilogía de ciencia ficción china que ha conquistado a cinco millones de lectores en todo el mundo.
RESEÑA: La premiada y elogiada trilogía de los Tres Cuerpos de
Cixin Liu llega a su conclusión tras el deslumbrante inicio de
El problema de los Tres Cuerpos y la apabullante
El bosque oscuro. La rica e imaginativa historia de ciencia ficción que le ha valido al escritor chino el premio Hugo llega a su final con una
gran traca final que apuesta por un
asombroso despliegue de una gran variedad de temas que podrían ser materia de un buen puñado de novelas del género, pero que Liu reúne en su obra de más de 700 páginas para llevarnos de una sorpresa a otra en la montaña rusa que es
El fin de la muerte. Una pena que
los personajes no estén a la altura del trasfondo, o al menos tengo que reconocer que la protagonista de esta última parte no se encuentra a la altura del Luo Ji que atrapaba al lector en
El bosque oscuro, por poner un ejemplo cercano.
El inicio de esta última entrega nos lleva de vuelta al
inicio de la era de la Crisis, cuando la Tierra ha descubierto ya la amenaza de los
Trisolarianos y se prepara para tratar de hacerles frente; gracias a ello podemos ser testigos de algunos de los sucesos que ya conocemos a través de nuevos puntos de vista. Así conoceremos al joven
Yun Tianming, un hombre con una enfermedad terminal cuya suerte dará un giro inesperado y al que su particular relación con el género humano lo colocará en primera línea de un atrevido plan.
Pero la protagonista principal de la obra es Cheng Xing, una ingeniera aeroespacial reclutada para trabajar en un osado proyecto de defensa de la Tierra, y que acabará en el centro de una de las crisis más importantes de la historia de la humanidad. Sin embargo, su papel queda pronto reducido a la de mero testigo de lo que ocurre ante ella, y salvo por un par de momentos muy puntuales en los que participa más activamente en la trama, su personalidad apenas aporta nada a la historia. Aún así, este tercer libro vuelve a apostar por una historia coral donde también saltan a la palestra numerosos personajes menores para ofrecernos una perspectiva mayor de todo lo que ocurre en el universo, algo que también ofrece un mayor dinamismo a toda la obra.
Pero sin duda el gran punto fuerte de la novela es su apuesta por el sentido de la maravilla y por la pura intención de sorprender al lector, imaginando el grandioso desarrollo y crecimiento que la ciencia puede otorgar a la humanidad. Liu nos lleva hasta las últimas fronteras de nuestro futuro, donde la ciencia humana y la trisolariana se dan la mano para abrir las puertas de tecnologías o conocimientos teóricos a años luz de nuestro mundo actual.
El escritor chino nos sorprende con una plétora de sucesos, giros argumentales y nuevos descubrimientos que mantienen al lector en un continuo estado de alerta, y que extienden la historia de la humanidad durante milenios y milenios. En el último tramo de la novela marca quizá un giro demasiado brusco en el desarrollo completo de la historia, pero que nos deja una conclusión igualmente sorprendente.
En conjunto El fin de la muerte es una ambiciosa novela que despliega multitud de temas y asuntos de la ciencia ficción, con una imaginación y una refrescante originalidad que se asegura la fidelidad del lector. Por desgracia, la protagonista principal de la historia no tiene el gancho del divertido "Da Shi" Quiang de El problema de los Tres Cuerpos o del profundamente cercano Luo Ji de El bosque oscuro, y se limita más bien a una mero testigo de lo ocurre. Aún así, la historia que concluye la trilogía de los Tres Cuerpos es un impresionante viaje al corazón de los secretos del universo, descubriéndonos nuevas facetas y nuevos misterios que al tiempo que nos empequeñecen nos hacen ser optimistas ante el futuro de la raza humana en el espacio.
El fin de la muerte (Trilogía de los Tres Cuerpos, 3)
Traducción de Agustín Alepuz Morales. Corrección de David Tejera Expósito