martes, 23 de enero de 2018

Reseña: Muerte de la Luz, de George R. R. Martin

SINOPSIS: Worlorn, durante su esplendor, albergó el fastuoso Festival de los Mundos Exteriores; ahora es un planeta moribundo que se aleja irremediablemente de la Rueda de Fuego para sumirse en una noche sin fin. A él viaja Dirk t'Larien con la esperanza de reencontrar el amor de Gwen Delvano y expiar errores del pasado; pero en su lugar hallará a Gwen unida por jade-y-plata a Jann Vikary y a su teyn Garse Janacek, en un vínculo incomprensible de amor y de odio, tan terrible y a la vez tan grandioso como el fin inevitable de Worlorn. 
Muerte de la luz es una de las historias de amor más hermosas jamás contadas. Su protagonista se debate entre el amor egoísta, que reclama el ser amado para sí, y la lealtad a un grupo, ese otro tipo de amor que es a la vez instinto de supervivencia en un entorno hostil como el de Worlorn. Martin, con su prosa delicada y sincera, hechiza al lector y lo conduce a través de ciudades y paisajes de ensueño hasta lo más profundo del alma humana. 


RESEÑA: El universo de los Mil Mundos es la ambientación imaginaria creada por George R. R. Martin donde transcurren varias novelas (como la que hoy reseño) y una larga lista de relatos distribuidos en diversas antologías (podéis encontrar la mayoría en los tres volúmenes de la autobiografía literaria de Martin publicados por Gigamesh). El escritor célebre por Canción de Hielo y Fuego inició su carrera novelística con esta Muerte de la Luz publicada en 1977 y en la que se aprovecha de esta abigarrado y bien construido universo de ciencia ficción para narrarnos una historia de amor, sacrificio, choque de culturas y supervivencia. El resultado final no llega a ser todo lo redondo que uno querría pero aún así construye un potente narración donde el protagonista no deja de debatirse entre sus sentimientos y el vínculo a una nueva "familia".
Desde luego la ambientación de la obra es uno de sus grandes puntos fuertes. Martin nos presenta el asombroso mundo de Worlorn, un planeta errante que gira alrededor de siete soles diferentes. Durante un tiempo se ha mantenido a la luz de estos soles, pero mientras sigue su curso inevitablemente se aleja de la luz, el calor y la vida. Durante su época de máximo esplendor Worlorn fue el lugar donde se celebraba el grandioso Festival de los Mundos Exteriores, donde diversas culturas y razas se unieron para poblar el planeta y lleva hasta él muestras de sus diversas civilizaciones. Ahora que el planeta agoniza, es un gigantesco cementerio casi abandonado, donde solo la vegetación y los animales reinan bajo una luz que cada día mengua más.
Desde este planeta le llega a Dirk t'Larien un mensaje inesperado: su antigua pareja, Gwen Delvano, le pide que vuelva con él. A pesar del tiempo transcurrido desde su ruptura, Dirk es incapaz de negarse y vuela hasta Worlorn sin saber muy bien que se encontrará. Lo que no tarda en descubrir es que Gwen está unida por jade-y-plata con Jaan Vikary y su teyn Garse Janacek. Una relación de amor, odio y supervivencia que caracteriza a la brutal y estratificada sociedad kavalar, donde los clanes enfrentados luchan despiadadamente por su honor, y donde cualquier debilidad es duramente castigada por su código de conducta donde los duelos a muerte y los enfrentamientos están a la orden del día.
Dirk tendrá que descubrir cuál es la verdadera razón que ha hecho a Gwen llamarlo ahora, y que se esconde en la extraña relación que mantiene con los dos hombres de Alto Kavalar. Mientras tanto disfrutará de su 'hospitalidad' en el agonizante mundo de Worlorn, donde restos de 14 culturas diferentes se encaminan hacia la noche eterna y el frío de la muerte.
Como es habitual en él, Martin logra construir sociedades y culturas con una profunda pátina histórica, dotándolas de gran realismo y de la suficiente originalidad como para atrapar la atención del lector. Por supuesto, es el mundo de Alto Kavalan y la sociedad kavalar la que ocupa gran parte de la trama de la novela, presentándonos un cultura donde el honor, la estratificación social, la dominación sobre los más débiles (directamente definidos como causi-hombres) y la violencia son las normas. El trío de amantes-pareja, que se mueven entre la fidelidad, la devoción y el odio, tampoco son bien vistos por el resto de kavalares al no ser lo suficientemente tradicionales y alejarse de algunos de los modos sociales de su mundo original.
Dirk se encuentra enfrentado a un mundo que no comprende y a una sociedad que le causa rechazo, y sobre todo, desconcertado por la extraña relación que mantiene Gwen con Jaan y Garse.  Los dos temas principales de la novela son el motivo del amor perdido (con Dirk en busca de una nueva chispa u oportunidad de ver renacer su antigua relación con Gwen) y las estrictas cadenas del condicionamiento cultural, que se entrelazan a lo largo de la trama de toda la novela. Este último está manejado con gran habilidad, para mostrarnos claramente como cada cultura nos restringe y limita nuestra forma de ver la realidad.
Aunque durante el último tercio de la obra se pierde un poco de ritmo, a pesar de que la historia se convierte en una brutal cacería por el mundo abandonado, Martin logra imprimirle la suficiente fuerza a la lucha interna del protagonista. Lo que está claro es que el final elegido por el escritor desde luego no dejará indiferente a ningún lector.
Muerte de la Luz es una historia de amor y sacrificio, y sobre todo de lucha contra los condicionantes culturales que nos convierten en lo que somos. Martin nos transporta hasta un entorno decadente, agonizante, para hablarnos del amor perdido, de la esperanza y de hasta que punto estamos dispuestos a sacrificarnos por aquellos a quienes amamos. Con un ritmo más pausado, el escritor recrea una cultura tan original, brutal y extraña como la kavalar, donde sus miembros son despojados de la humanidad (o al menos de la humanidad suficiente para reconocerla en los que no son como ellos) y que nos demuestra que todas nuestras convicciones culturales pueden ser una mera fachada para ocultar lo monstruoso de nuestras forma de vivir.

VALORACIÓN 8/10

FICHA
Muerte de la Luz
George R. R. Martin
Gigamesh
304 páginas, rústica sin solapas
6 euros 

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7 comentarios:

  1. Holaa
    Me lo compré el otro día, no me pude resistir^^
    Un besico

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  2. Me lo autoregalé por Navidades y lo leí en pocos días. La ambientación me pareció lo mejor con diferencia, junto con las diferentes culturas que crea y las ciudades que estos construyeron. La parte final del libro baja bastante, pero en general disfruté mucho y no descarto leer algo más de CF de Martin.

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  3. Aunque tiene algunos fallos, es una novela con grandes aciertos y que merece muy mucho su lectura. Todo lo relacionado con la cultura kavalar es de lo mejor de la novela.

    Excelente reseña,saludos.

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    Respuestas
    1. ¡Muchas gracias!
      Aunque no tienen casi nada que ver, los kavalares me han recordado a los dothrakis.

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    2. yo tambien pense en ellos como dothrakis espaciales

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    3. Justo ayer empecé con el libro (y sí, ya estoy entrando en reseñas jaja) y llevo todo el rato igual, pensando en ellos como una especie de dothrakis!

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  4. Leí esta novela antes que El sueño del Fèvre, en uno de los "entreactos" de CdHyF y me gustó muchísimo. El tema es muy original y está escrito de forma sensacional. A Martin le ponen muchísimo los ambientes crueles, jaja.

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